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Ocoyoacac, Méx. La temporada de lluvias ya comenzó a hacer sentir su fuerza en La Marquesa, y con ella llegó no solo el agua, el lodo y los encharcamientos, sino también una baja en las ventas y la afluencia de turistas. Locatarios y trabajadores de la zona comentan que durante esta temporada sus ventas bajan hasta un 60 por ciento.
Impacto directo en los negocios
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”, ubicada en El Valle La Loma, explicó que las lluvias del pasado domingo 1 de junio llegaron acompañadas de viento y granizo, al afectar distintos puntos de la zona como Valle del Pachón.
Se nos hizo un poquito pesada la lluvia, como pueden ver aquí: toda el agua se metió, pero ya estamos limpiando para recibir a nuestros clientes
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”
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Aunque no se reportaron daños graves, explicó que el lodo arrastrado por el agua ingresó a varios comercios y obligó a los trabajadores a hacer labores de limpieza intensiva. Pero más allá del esfuerzo físico, lo que más preocupa a los locatarios es la baja de visitantes.
Con la temporada de lluvias la afluencia baja considerablemente. En algunos valles apenas llegamos al 40 por ciento de lo normal, porque a la gente no le gusta estar bajo la lluvia
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”
Resiliencia y posibles causas de inundaciones
Comentó que esta situación se agrava con la llegada de la temporada vacacional, pues muchos mexiquenses y capitalinos optan por salir a otros destinos, lo que deja a los comerciantes de la zona en un periodo que muchos describen como “abandono”.
Nos dejan solos
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”
Pese a las inclemencias del clima y la baja afluencia de personas, los locatarios han tomado medidas para mantener la calidad del servicio y la calidez del ambiente.
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Aquí seguimos trabajando, tenemos alimentos de primera calidad, chimeneas encendidas y todo listo para que el visitante se sienta como en familia
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”
Además, durante el trayecto de la carretera México–Toluca con dirección a la capital del país, se observaron pequeños deslaves en las laderas, así como ligeros encharcamientos en el cruce hacia Chalma.
En el trayecto con dirección a Toluca, las zonas afectadas el pasado domingo, ya lucían despejadas este lunes.
Una trabajadora cercana a la plaza de Las Alas informó que su cabaña ubicada en esa sección se encharcó ligeramente, por lo que mojó y enlodó algunos muebles.
Aquí somos gente trabajadora, así como sube, baja y a limpiar
Blanca Isabel Martínez, trabajadora de la cabaña “El Ranchero”
Comentó que, en parte, las inundaciones se deben a la construcción de la autopista la cual bloqueó un cauce natural, lo que ha dificultado el desagüe.
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