Toluca, Méx. El mes de junio arranca para la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx) con el mismo escenario de parálisis política, administrativa, educativa y democrática con el que transcurrió mayo: facultades sin clases y la Rectoría aún tomada.
El paro estudiantil, decretado por alumnos inconformes, mantiene suspendidas las actividades académicas, sin que hasta ahora existan señales claras de una solución cercana. No hay indicios de diálogo efectivo ni acuerdos que permitan pensar en un pronto regreso a la normalidad.
La manifestación del pasado viernes confirmó el distanciamiento entre la administración central y la comunidad estudiantil. Aquella jornada, marcada por actos vandálicos en el edificio administrativo, dejó ver la fractura institucional y alejó las posibilidades de un diálogo constructivo.
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Ese mismo día, el Enjambre Estudiantil Unificado, organización surgida como representante del movimiento estudiantil, difundió un comunicado en el que cuestionó la falta de respuesta a sus pliegos petitorios y criticó el carácter unilateral del diálogo ofrecido por la Rectoría.
Reiteraron que la marcha tuvo tres ejes centrales:
En paralelo, en redes sociales trascendió el supuesto interés de Eréndira Fierro Moreno, excandidata a la Rectoría, de reincorporarse al proceso con el argumento de que nunca renunció formalmente. Sin embargo, esta versión fue desmentida horas después.
Por su parte, el Consejo Universitario sesionó una vez más a puerta cerrada. A través de su vocería, se informó que se avanzó en el análisis jurídico de la reforma al Estatuto Universitario, en particular del artículo 43, así como en los trabajos relacionados con la forma de votación para elegir a la persona titular de la Rectoría.
Se aseguró que estos avances responden a la demanda de reformar el marco normativo de la UAEMéx y atienden, en parte, las peticiones del movimiento estudiantil.
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En medio de las críticas por su postura permisiva ante los actos de vandalismo ocurridos en el edificio administrativo, la Universidad difundió un comunicado oficial en el que reiteró su disposición al diálogo con el estudiantado. Aseguró que la protesta no será criminalizada y que sigue abierta la posibilidad de establecer una mesa de comunicación directa.
Convocamos a continuar en la construcción de acuerdos en beneficio de nuestra universidad, bajo la unidad y la reconciliación”, concluye el comunicado institucional.
Sin embargo, el distanciamiento entre estudiantes y autoridades se profundizó tras los recientes cambios en la estructura del gabinete universitario y la ratificación de Isidro Rogelio Fajardo como encargado del despacho de la Rectoría.
Los estudiantes insisten en desconocerlo como interlocutor válido, al señalar como parte del grupo político encabezado por el exrector Carlos Eduardo Barrera Díaz y la excandidata Eréndira Fierro.
De esta manera, la UAEMéx inicia junio sin clases, sin rector electo y con una comunidad fracturada, en un escenario cada vez más lejano de la reconciliación que pregonan sus autoridades.
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