En medio del debate sobre la viabilidad de eliminar organismos autónomos, el gobierno mexiquense ha puesto sobre la mesa la desaparición del INFOEM, argumentando eficiencia y austeridad. Lo que debería ser una discusión sobre el fortalecimiento de la transparencia y el acceso a la información ha quedado opacada por el actuar de su comisionado presidente, José Martínez Vilchis. Mientras se plantea absorber las funciones del órgano garante y transferir a su personal a instancias del Ejecutivo, Martínez Vilchis ha optado por gastar en viajes y viáticos, en lugar de defender con hechos la relevancia del instituto que encabeza. La iniciativa para extinguir al INFOEM y redistribuir sus funciones entre instancias del Poder Ejecutivo puede parecer, en el papel, un movimiento lógico de contención del gasto burocrático. Pero lo cierto es que, en un contexto de creciente demanda ciudadana por la rendición de cuentas, el cierre de un órgano autónomo de transparencia resulta por lo menos preocupante. Más aún cuando su actual titular, José Martínez Vilchis, ha mostrado escasa voluntad para defender su razón de ser, dedicando tiempo y recursos a viajes que poco aportan a la rendición de cuentas.

Sin reelección en CODHEM
La diputada Martha Azucena Camacho Reynoso ha puesto sobre la mesa una discusión: la reelección en la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM). Su iniciativa para prohibir la repetición en el cargo responde a una preocupación legítima sobre los riesgos que conlleva la permanencia prolongada en puestos de poder, como el debilitamiento de la rendición de cuentas y el potencial surgimiento de redes de corrupción. En un órgano cuya misión es garantizar y defender los derechos fundamentales, la rotación en su presidencia no sólo es sana, sino indispensable. Eliminar la posibilidad de reelección en la CODHEM es una medida para evitar la consolidación de figuras que, amparadas en la continuidad, puedan perpetuar vicios institucionales. Renovar el liderazgo cada cuatro años sin opción a reelección podría devolverle a este organismo la legitimidad y autonomía que tanto necesita para cumplir con su labor crítica frente a las autoridades estatales… y nadie sabe si fue mensaje directo para la actual titular Myrna García Morón.

Desconfianza en el proceso
La consulta iniciada este miércoles en la Universidad Autónoma del Estado de México marca un momento histórico en la vida institucional de la UAEMéx: por primera vez, se discute la posibilidad de abrir a votación universal la elección de rector o rectora. El rector interino, Isidro Rogel, ha sido quien encabezó este proceso tras el aval del Consejo Universitario a la propuesta de reforma. Si bien el ejercicio fue bien recibido por sectores que buscan retomar las clases y cerrar el semestre, también ha sido motivo de fuertes críticas por parte de estudiantes en paro, quienes cuestionan la legitimidad, oportunidad y transparencia del mecanismo. Llega con retraso y desconfianza. El rector interino Isidro Rogel debió anticiparse al malestar estudiantil y abrir este diálogo antes de que el paro escalara. Su implementación enfrenta el escepticismo de una parte importante del estudiantado, especialmente aquellos organizados en la Asamblea.

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