Con el cierre de la Jornada Electoral Judicial, el Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM) entra en una fase clave para la democracia mexiquense. La magistrada presidenta Patricia Tovar Pescador aseguró que el órgano jurisdiccional se encuentra preparado para recibir y resolver los recursos legales que pudieran presentarse tras los cómputos distritales. Esta declaración, más que una parte institucional, reafirma el compromiso del TEEM con la legalidad y la certeza en los procesos electorales, un aspecto esencial para mantener la confianza ciudadana en las instituciones. El Tribunal Electoral del Estado de México está listo para garantizar la legalidad post-electoral. Al destacar que el plazo para recibir impugnaciones será de cuatro días una vez finalizados los cómputos, se deja claro que el trabajo de vigilancia electoral no termina con el voto, sino que continúa con la revisión puntual de sus resultados. En este contexto, la labor del TEEM será crucial para dirimir controversias y asegurar que cada etapa del proceso electoral se apegue al marco constitucional.

Lo que son las cosas
Mientras el rector interino Isidro Rogel busca sostener el timón de la Universidad Autónoma del Estado de México en medio de la tormenta, el nuevo rector electo y los estudiantes intentan rescatar lo esencial: el semestre, la presión estudiantil, sin embargo, no cede; su movimiento ha tomado nuevas formas de expresión que amplifican su mensaje más allá de las aulas. “Esta vez no nos van a callar”, gritan en coros los universitarios en paro, mientras su protesta se convierte también en fenómeno cultural. A través de TikTok, el colectivo Estudiante Anónimo ha lanzado música de banda, reguetón y hasta un corrido tumbado como himnos de resistencia, dejando claro que el movimiento no es sólo político, sino también generacional. En contraste, las autoridades universitarias parecen atadas a una lógica institucional que va por detrás del ritmo de los jóvenes. El pulso en la UAEMéx está marcado por una lucha simbólica: entre salvar la rectoría o salvar la universidad.

A la baja
La Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (CODHEM), bajo la presidencia de Myrna García Morón, ha reportado una reducción significativa, casi del 50%, en el número de quejas atendidas por presuntas violaciones a derechos humanos entre 2021 y 2023. Esta disminución, que a primera vista podría interpretarse como una mejora en el respeto a los derechos fundamentales, debe analizarse con cautela. La baja en los expedientes podría reflejar una falta de confianza en la institución o una menor visibilidad de la CODHEM en territorios vulnerables. La cifra, por sí sola, no basta como indicador de eficacia. Pese a la reducción de quejas recibidas, la CODHEM asegura que su labor no se ha debilitado, sino que ha evolucionado hacia enfoques preventivos y de mediación, acompañados de asesorías técnicas más eficientes. Este giro estratégico, promovido por la presidenta Myrna García Morón, busca consolidar una institución más proactiva que reactiva.

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