Metepec, Méx. Apenas pasaban las 9:30 de la mañana cuando Porfirio Morán Reyes, un hombre de 74 años con dificultades para caminar, apareció en la casilla instalada en Rancho San Lucas, en Metepec, para ejercer su derecho al voto.

“No podíamos quedarnos en casa”, dijo, apenas terminó de depositar sus diez boletas.

Apoyado en su andadera y en el brazo de su esposa Consuelo Orduña García, se abrió paso entre los votantes que esperaban turno. No hubo marcha atrás. Dolorido de una pierna, con pasos lentos pero firmes, don Porfirio fue a cumplir lo que él considera un deber histórico: participar en la elección del Poder Judicial.

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“Hay que sacar a toda esa gente corrupta que está ahorita en el Poder Judicial, lo vemos con mucho ánimo, incluso sin importar las complicaciones físicas, nosotros sí queremos seguir con los cambios que ha tenido el país”, expresó con voz clara, emocionado, mientras mostraba orgulloso una hoja con anotaciones hechas a mano, donde él y su esposa organizaron su voto.

Apenas pasaban las 9:30 de la mañana cuando Porfirio Morán Reyes, un hombre de 74 años con dificultades para caminar, apareció en la casilla  / Foto: Arturo Hernández
Apenas pasaban las 9:30 de la mañana cuando Porfirio Morán Reyes, un hombre de 74 años con dificultades para caminar, apareció en la casilla / Foto: Arturo Hernández

Ambos trabajaron por semanas en su “acordeón electoral”, un listado donde anotaron a los perfiles que, tras consultar fuentes informativas, canales de noticias y redes sociales, consideraron más preparados para asumir cargos como jueces, magistrados o ministros.

“Nos costó trabajo ir decidiendo, revisamos perfiles en internet, en noticieros, en YouTube. Le digo que nos faltó tiempo, como semana y media más para conocerlos mejor”, comentó.

Pero, aun así, llegaron preparados: “Nadie nos lo impuso, no hubo comadrita ni partido, fue decisión propia”, afirmó doña Consuelo.

Lamenta campaña de desinformación

Con la claridad de quien ha vivido muchas elecciones, pero pocas como ésta, don Porfirio lamentó la campaña de desinformación previa al proceso y las voces que llamaron a la abstención.

Durante la entrevista, recordó cómo en su juventud enfrentó épocas de censura, cuando los medios eran controlados y los resultados electorales siempre favorecían al poder en turno.

“Me tocó la época en la que votar era inútil, cuando Paco Stanley fue candidato y solo ganaba por salir en la televisión, hoy no, hoy el voto sí puede hacer diferencia, y se lo digo a los jóvenes no necesitamos machetes ni balas, podemos cambiar todo esto con el voto”, dijo.

Don Porfirio lamentó la campaña de desinformación previa al proceso y las voces que llamaron a la abstención / Foto: Arturo Hernández
Don Porfirio lamentó la campaña de desinformación previa al proceso y las voces que llamaron a la abstención / Foto: Arturo Hernández

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Aunque el proceso fue lento, los votantes tardaban hasta 15 minutos con sus diez boletas, don Porfirio y doña Consuelo no se quejaron.

Y así, con su andar lento pero su convicción intacta, don Porfirio y doña Consuelo se alejaron de la casilla. Dejaron atrás su testimonio, un mensaje claro: cuando el compromiso es auténtico, ni el dolor, ni la edad, ni el desánimo pueden frenar la .

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